Martirologio Romano: En Ghistelles, en Flandes, santa Godeleva, mártir, la cual, casada con el señor del lugar, tuvo que sufrir mucho por parte de su esposo y también de la madre de éste, siendo finalmente estrangulada por dos criados. (c.1050 - 1070).
Joven francesa cuyos actos de piedad y caridad con los pobres se ganaron la aprensión de su marido y suegra, que la maltrataban de continuo.
Habiendo escapado de la casa conyugal y pedido auxilio al obispo local, fue sin embargo obligada a volver con su marido, que mandó estrangularla con las sábanas de su cama y hundir su cuerpo en un lago cercano.
La veneración de esta santa comenzó con una serie de milagros acaecidos en su tumba, como fue la curación de la hija de su marido, que se había vuelto a casar en segundas nupcias. A la vista de esto su marido confesó el crimen y tomó el hábito de los penitentes.
Es patrona de costureras, tejedores, sastres y lavanderas, por lo de la sábana.
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Fuente:
preguntasantoral.blogia.com
(c. 1049 – 6 de julio de 1070) fue una santa flamenca.
Etimológicamente significa “regalo de Dios”. Viene de la lengua
inglesa.
Esta joven vino al mundo cerca del Canal de la Mancha y murió en Bélgica en
el 1070.
Cuando alguien intenta escribir la biografía de otra persona, tiene que
verla bajo todos los ángulos y no quedarse en la parte más negativa que todo ser
humano lleva consigo.
En este caso, su biógrafo se fijó sólo en la tristeza que aparentaba ante
los demás, pero no penetró en las alegrías interiores y exteriores que debió
gozar esta bella joven.
Se casó muy joven, a los 18 años, con un joven acaudalado de Ghistelles,
Bélgica. Todo el mundo la contemplaba como hermosa, buena y amable.
Sin embargo – como suele decirse – le tomó manía a la suegra y tuvo que
desaparecer.
Según cuentan las leyendas de aquella época, dicen que estaban poseídos por
el demonio. No era verdad. A ella la metieron en un calabozo para que se
muriera de hambre...
A pesar de los obstáculos, logró escapar y se fue corriendo a la casa del
padre. Este, sin mucha conciencia y mucho menos amor, la llevó ante la justicia
eclesiástica.
El obispo de Tournai, siguiendo la moral de la Iglesia, le dijo a Godeliva
que tenía que unirse de nuevo a su marido.
Mientras que su padre estaba fuera, la arrojaron a un estanque. Y
comunicaron a todo el mundo que se había ahogado accidentalmente. Y así, sin
tener pruebas, murió esta joven por orden de su madre.
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Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB
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