San Maximiano de Siracusa, Obispo de Aix-la-Provence
Junio 8 - 9
Junio 8 - 9
†: s. I inc. - país: Francia
canonización: pre-congregación
En la población de Aix-en-Provence, en la Galia, san Maximino, a quien se atribuye el inicio del cristianismo en esta ciudad.
Las investigaciones históricas han fracasado hasta hoy en los intentos de 
conseguir informaciones concretas respecto a san Maximino de Aix, a quien el 
Martirologio Romano conmemora en este día, pero cuyo culto no se encuentra 
registrado en ninguno de los documentos antiguos. Ni siquiera se sabe con 
certeza en qué siglo vivió. Por otra parte, abundan los datos sobre el santo en 
las leyendas de Provenza sobre el arribo de las «Tres Marías» (María Magdalena, 
María de Cleofás y Salomé) y sus compañeros, una tradición que se consideraba 
auténtica hasta fines de la Edad Media, pero que, según datos fidedignos, no se 
conocía en Provenza antes del siglo XI.
De acuerdo con la leyenda, Maximino fue uno de los setenta y dos discípulos 
de Nuestro Señor que partieron de Palestina después de la Ascensión, en compañía 
de santa María Magdalena, santa Marta, san Lázaro, santa María Cleofás, santa 
María Salomé y otras gentes que conocieron a Cristo, para evangelizar la región 
de Provenza. Maximino se estableció en Aix, de donde llegó a ser el primer 
obispo. Cuando santa María Magdalena estaba en la agonía, fue llevada desde la 
cueva de Sainte Baume, donde había vivido hasta entonces, hacia un lugar sobre 
el camino, conocido ahora como el «Saint Pilón», a donde llegó san Maximino para 
darle el viático. A corta distancia del «Saint Pilón» se encuentra la iglesia de 
San Maximino, que fue construida en reemplazo de otra más antigua dedicada al 
mismo santo y que, al parecer, contenía sus reliquias y las de María Magdalena. 
El cuerpo de san Maximino fue trasladado en 1820 a la ciudad de Aix, de la que 
es patrón principal. Se dice que la supuesta cabeza de santa María Magdalena aún 
se conserva en la antigua cripta de San Maximino.
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Nota de ETF: Debe notarse que, puesto que lo único que poseemos sobre 
Maximino es su leyenda, y ésta, como muestra Butler, no es verdaderamente 
antigua, no poseemos realmente nada fuera del nombre: ni el oficio, ya que el 
hecho de que fuera un obispo es sólo una suposición sobre la base de que fue el 
fundador de una cristiandad local, pero en el elogio del Martirologio falta toda 
referencia de que se trate de un obispo; ni tampoco la fecha, ya que la 
clasificación en el siglo I proviene exclusivamente de la leyenda, y no está 
avalada ni por inscripciones ni por fuentes independientes. El propio Butler lo 
ubica, con dudas, en el siglo V, y una nota final del mismo volumen señala que 
la leyenda de Maximino parece haberse originado por la traslación a la Provenza 
de ciertas reliquias que se encontraban en Aydat, cerca de Billom, en Auvernia. 
Los mejores santorales disponibles en el web (Santi e beati, Ökumenisches 
Heiligenlexikon, Catholic Encyclopedia), incluso si mencionan a san Maximino de 
Aix en esta fecha, omiten todo desarrollo de su biografía.
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fuente: «Vidas de los santos de A. Butler», Herbert Thurston, SI
fuente: «Vidas de los santos de A. Butler», Herbert Thurston, SI
Tomado de: eltestigofiel.com


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