Novena a Santa Filomena, Virgen y Mártir, Por la Maternidad
Agosto 11
Patrona: bebés, esterilidad, niños, causas imposibles, recien nacidos,
enfermos.
- ORACION PREPARATORIA (Para todos los días)
Oh gloriosa Virgen y Mártir Santa Filomena! cuya devoción
parece haber reservdo Dios, en su eterna sabiduría para estos calamitosos
tiempos llenos de tanta impiedad, para avivar en nosotros la fe, sostener la
esperanza, e inflamar la caridad. Santa Filomena a quien Dios ha revestido de su
singular poder de intercesión para gloria de su santo nombre y para utilidad de
la Iglesia! Miradme postrada a tus pies, llena de confianza, reconociendo en ti
una gran abogada y protectora de los pobres y de todos los afligidos. Mártir de
Cristo llena de bondad! Recibeme hoy bajo tu manto celestial amparame y
protegeme con tu poderosa intercesión.
Más para que yo sea digna de este
favor alcanzame aquella virginal pureza por la que tu sacrificaste todo lo que
el mundo tiene por más honorífico. Alcanzame aquella fortaleza de ánimo que a ti
te hizo resistir valientemente todos los halagos del emperador Dioclesiano y
finalmente comunicame un amor ardiente a la fe de Jesucristo por la que tú
padeciste los más crueles y dolorosos tormentos.
Junto con estas suplicas te
ruego, con todo fervor d emi alma, me alcances de Dios el favor particular que,
en esta novena he venido a solicitar de tu generosa intercesión. El
misericordiosísimo Jesús, tu Esposo Divino, por cuyo amor sufriste el martirio y
la muerte, o negará nada a tus ruegos.
Sí candorosa Virgen y valerosa
mártir! No te negará nada el buen Dios que dijo "PEDIR Y RECIBIRÁS" y podrá
entonces realizar en mí la infalibilidad de estas sus generosas promesas. Así lo
espero de la caridad que arde en tu compasivo y virginal corazón.
- ORACION FINAL (Para todos los días)
Ruega por nosotros Santa
Filomena.
Para que seamos dignos de las promesas de Nuestro Señor
Jesucristo.
¡ Oh gloriosa Virgen invencible mártir Santa Filomena! Tu
que por amor al Corazón Sagrad de Jesús, sufriste dolorosos tormentos y
derramaste toda tu sangre virginal y entregaste tu tierna y angelical vida, en
testimonio heroico de la verdad de la religión cristiana que yo misma tengo el
honor de profesar, presenta ante Dios en mi favor estos tus martirios y por tus
valisosas suplicas alcanzame de El este amor ardiente a Jesucristo junto con el
favor especial que ahora he solicitado, para que sirviendo fielmente mientras
viva, a tan soberano Rey y Señor logre felicidad de posserle, junto contigo, en
el reino de los cielos. Amén.
¡Santa Filomena, Virgen y Mártir
llena de pureza! que en el siglo IV, siglo lleno aún de idolatría y de
corrupción pagana, a pesar de los prestigios, del error y del odio que
profesaban a los cristianos los vanos adoradores de los falsos dioses, diste un
heroico testimonio de fe. Niña llena de sabiduría que a los once años, en una
edad tan tierna, en que las ilusiones del mundo ofrecen escollos a la inocencia,
tu escapaste de sus lazos consagrando a Jesucristo tu virginal pureza que habías
de guardar inviolable aún a costa de tu vida. ¡Santa Filomena!, por esta
virginal pureza, hoy perla preciosísima de tu celestial corona, te ruego
atiendas mis suplicas y te dignes presentarlas a tu Divino Esposo y por tus
méritos alcanzame de El esta fe viva y esta pureza de corazón, sin las cuales no
se puede entrar en el Reino de Dios. Amén.
(Se reza Padre Nuestro, Ave
María y Gloria, se hace la petición)
¡ Santa Filomena, Virgen y Mártir llena de firmeza!, a quien
los vanos placeres del mundo no lograron seducir con sus brillantes atractivos.
Las promesas y caricias más halagadoras te encontraron insensible. Tu
despreciaste el trono de Roma, el primer trono del mundo, rehusando la mano y la
corona que te ofrecía el emperador Dioclesiano, el más poderoso monarcade la
tierra en aquella época, por servir con fidelidad a Jesucristo elegido esposo
purísimo de tu alma. ¡Santa Filomena!, te suplico me alcances la gracia de saber
apartar mi corazón de las vanidades de la tierra y, dominando mis pasiones,
pueda superar los obstáculos que se opongan a mi eterna salvación y poder lograr
un día llegar contigo a la posesión de la patria celestial. Amén.
(Se
reza Padre Nuestro, Ave María y Gloria, se hace la Petición)
¡ Santa Filomena, virgen y mártir
llena de fortaleza! tu a pesar de tu tierna edad, hiciste brillar con espíritu
robusto el fervor de tu humilde y constante oración. Fortalecida con ella
despreciaste los halagos. La oración te ayudó a sobrellevar las incomodidades de
la prisión, a soportar el ayuno, los horrores de las cadenas, y a rechazar los
honores comprados a cambio de la infidelidad a Jesucristo, a quien te
consagraste por el voto de la virginidad. Santa Filomena! alcanzame de Dios te
ruego este espíritu de oración a fin de que pueda resistir las malas
inclinaciones de mi naturaleza y de preferir todos los trabajos y sufrimientos
antes de ofender al Señor que es digno de todo honor y de toda gloria. Amén.
(Se reza Padre Nuestro, Ave María y Gloria, se hace la Petición)
¡ Santa Filomena
Virgen y Mártir llena de valor! que sufriste grandes y vergonzosas humillaciones
cuando te arrastraron por las calles públicas de la ciudad de Roma en medio de
los gritos del pagano populacho, siempre sediento de la sangre de los cristianos
y donde dejaste girones de tu carne virginal. Con ejemplar resignación tu viste
a los verdugos flagelar, con látigos de puntas de acero tu delicado y juvenil
cuerpo, sufriste estos tormentos por amor a tu Divino Esposo Jesucristo nuestro
Salvador. ¡ Santa Filomena !, te ruego me alcances de Dios la gracia de dominar
mis flaquezas y flagelar la sensualidad con saludables penitencias,
principalmente con las que han sido establecidas por la iglesia, para que pueda
agradar al Señor y obtener un lugar en el reino de sus escogidos. Amén.
(Se reza Padre Nuestro, Ave María y Gloria, se hace la Petición)
¡Santa Filomena,
Virgen y Mártir llena de constancia! tu con tu paciencia heroica en los
tormentos agotaste la furia de tus verdugos y cansaste sus brazos
ensangrentados. El Señor quiso curarlos para redoblar tus combates y multiplicar
tus triunfos. Conducida de nuevo ante el Emperador perseveraste en tu
determinación de amor a Jesucristo e iluminada del cielo confundiste a quienes
osaron atacar las verdades de nuestra fe. ¡Santa Filomena! te ruego me alcances
de Dios la gracia de amar y servir fielmente al mismo Jesús y de no separarme de
El en esta vida para después verte y gozarle eternamente.
(Se reza Padre
Nuestro, Ave María y Gloria, se hace la Petición)
¡Santa Filomena Virgen y Mártir
inalterable! condenada a ser arrojada a las aguas de río Tiber. Atada al cuello
un ancla fuiste precipitada a sus aguas; más el Señor envió dos angeles que
hicieron pedazos el ancla y la lanzaron al fondo del río y en sus brazos fuiste
transportada completamente ilesa a la playa. Ante este prodigio realizado por
Dios en tu favor, tu viste convertida a la fe de Jesucristo una multitud de
espectadores paganos, lo que lleno de consuelo a tu atribulado corazón. ¡Santa
Filomena! alcanzame la gracia de llevar una vida verdaderamente cristiana a fin
de que con este ejemplo pueda edificar a mis prójimos, mantenerlos en amistad e
Dios y enseñarles así el camino del paraíso celestial al que, con tu mediación,
espero también llegar.
(Se reza Padre Nuestro, Ave María y Gloria, se
hace la Petición)
¡Santa Filomena Virgen y Mártir invencible! La constancia de tu fe y la
fidelidad inviolable a tu Divino Esposo Jesucristo hicieron que el verdugo te
entregara a un nuevo tormento y tu virginal cuerpo atado a un árbol, fue
traspasado por una lluvia de agudas flechas. Se agotaron tus fuerzas por el
derramamiento de sangre y moribunda te condujeron de nuevo a la cárcel donde,
después de un dulce y placentero sueño que te envió el Señor, despertaste
fortalecida con una nueva vida. ¡Santa Filomena! alcanzame de Dios el valor
suficiente para rechazar los impulsos pecaminosos que el maligno espíritu lanza
constantemente contra mí a fin de que obtenga como tu la palma del triunfo y
pueda gozar de la paz del Señor. Amén.
(Se reza Padre Nuestro, Ave María
y Gloria, se hace la Petición)
¡Santa Filomena Virgen y Mártir llena de heroísmo! tu fuiste
conducida por la ira del tirano al suplicio de los dardos encendidos en vivo
fuego que habrían de acabar con tu vida terrena. Más por el poder de Dios los
flecheros quedaron impotentes sin poder dar con sus dardos encendidos. ¡Santa
Filomena! Obtenme de Dios la gracia de saber despreciar las incitaciones de los
enemigos de mi alma que son el mundo, el demonio y la carne. Que sepa huir de
las malas lecturas, de las conversaciones peligrosas, de las malas compañías y
de todas aquellas ocasiones en que mi alma puede encenderse en el vivo fuego del
pecado, para que permaneciendo siempre file como tu, a mi Divino Salvador pueda
gozarle en la Vida Eterna en compañía de los limpios y puros de corazón. Amén.
(Se reza Padre Nuestro, Ave María y Gloria, se hace la Petición)
¡Santa Filomena,
Virgen y Mártir gloriosa! que terminaste tus combates por la fe con un ilustre
martirio. Desesperado Dioclesiano de no conseguir sus deseos mando al verdugo a
que te decapitara, y tu alma voló luminosa, con la corona de las vírgenes y la
palma de los martíres como emblema de un triunfo, hacia el seno del Esposo de
las Vírgenes, quien recibió triunfante y la colocó en el coro de los escogidos.
¡Santa Filomena, preciosa mártir!, dígnate coronar el final de esta novena
alcanzandome de Dios, que nada te rehúsa, la gracia de amar con todo mi corazón
a la Santísima Virgen María, la Reina más pura de las Vírgenes y de los
mártires, que te consoló en la prisión y confortó tu espíritu para sufrir
valerosamente el martirio. Que ella me ampare con su protección maternal, en las
penas de este valle de lágrimas, me defienda en la hora de mi muerte, y después
goce de su presencia, en tu compañía en el reino eterno de la Gloria. Amén.
(Se reza Padre Nuestro, Ave María y Gloria, se hace la Petición)